Si tiene pensado mandar a su hijo lejos de casa para estudiar, son muchas las preocupaciones que le vienen a la cabeza, ¿podrá tener tiempo suficiente para obtener buenas calificaciones?, ¿pasará problemas con la alimentación?, ¿se adaptará con facilidad al entorno universitario o tendrá problemas para hacer nuevas amistades?, ¿vivirá en buenas condiciones de seguridad y servicios?, si quiere matar varios pájaros de un tiro, la residencia universitaria con piscina en Barcelona es la mejor alternativa.
Se preguntarán qué puede aportar una piscina en la educación de su hijo, y en realidad no se trata de los estímulos cerebrales que se pueden obtener al nadar diariamente, o la condición física, en realidad es el área común incluido el solárium el que soluciona diversos aspectos de un joven estudiante.
Ventajas de la piscina en la residencia
1.- Es un espacio ideal para hacer relaciones sociales, descansar, liberar estrés, y estimular su motivación para el posterior estudio, y teniendo la oportunidad de todo ello en la propia residencia, no es necesario salir a otros lugares para desconectarse momentáneamente de sus obligaciones.
2.- Economiza los gastos de transporte: teniendo un ambiente ideal para el disfrute tan cerca no será necesario gastar en transporte público o privado para dirigirse a centros deportivos o la casa de sus compañeros.
3.- Obliga a los residentes a relacionarse y compartir experiencias, la interacción con otros estudiantes es indispensable para una experiencia positiva en cualquier universidad, bien sea con compañeros más avanzados que puedan ayudarlo con sus clases o sus horarios, o amigos del mismo año para estudiar juntos y establecer un cronograma de actividades.
En general, no es la piscina lo que realmente vale, sino un ambiente agradable, y acorde a una persona joven, que necesita socializar y relacionarse, si a eso le sumas que la residencia cuenta con pensión de desayuno almuerzo y cena y limpieza general, por lo menos una vez a la semana, habrás dado justo en el blanco.
